8 de marzo: Día Internacional de la
Mujer

los nuevos Objetivos mundiales
del Desarrollo y en la
revisión Beijing+20 de medidas específicas que
reconozcan
los derechos y empoderen a estas mujeres y niñas con
discapacidad,
especialmente a las que tienen una discapacidad intelectual o del desarrollo.
Madrid, 6 de marzo de 2015. El próximo 8 de marzo se celebra en
todo el mundo el Día Internacional de la Mujer. Con este motivo, la
Confederación española de organizaciones en favor de las personas con
discapacidad intelectual o del desarrollo (FEAPS) advierte de las brechas que
siguen existiendo en relación a la inclusión de las mujeres y niñas con
discapacidad intelectual o del desarrollo en nuestras sociedades.
En 1995, 189 gobiernos de
todo el mundo firmaron la Declaración de Pekín, estableciendo una serie de
objetivos que tenían como fin materializar los derechos de las mujeres. Pese a
que ha habido avances, las brechas existentes entre mujeres y hombres aún son
muchas y profundas. En esta declaración se afirmaba que “muchas mujeres se
enfrentan a barreras para el disfrute de sus derechos humanos y su plena
igualdad debido a factores como su discapacidad” […] Estas mujeres se ven
“particularmente afectadas por desastres ambientales, enfermedades graves e
infecciosas y diversas formas de violencia contra la mujer”. Junto a todo ello
la Declaración también habla de las dificultades de estas mujeres con
discapacidad para acceder a la justicia.
Este 2015, el Día
Internacional de la Mujer tiene como lema “Empoderando a las mujeres,
empoderando a la humanidad, ¡Imagínalo!”. Este empoderamiento es especialmente
necesario en el caso de las mujeres y niñas con discapacidad intelectual, cuyas
oportunidades de participar en la sociedad son aún muy escasas en estos
momentos. Por eso, como aspectos fundamentales de este empoderamiento, FEAPS reclama
que se garantice el acceso -en igualdad de condiciones que el resto-, a la
educación, a los sistemas de salud, a la formación para el empleo y el mundo
laboral, a la justicia, a la información, etc. adoptando junto a todo ello
medidas específicas que acaben con la violencia ejercida contra las mujeres con
discapacidad intelectual y les permitan denunciar situaciones de
discriminación.
Estas garantías deberán
introducirse específicamente como compromisos en las nuevas estrategias
globales de la revisión, 20 años después, de la Declaración de Pekín; y también
en los nuevos compromisos que surjan de la celebración del Año Europeo para el
Desarrollo en el que la UE revisará el cumplimiento de los Objetivos del
Milenio y establecerá sus prioridades para lograr la igualdad de género y el
empoderamiento de las mujeres con discapacidad.
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